
Como se negase a ofrecer sacrificios a los dioses, el bárbaro juez, al saber que era maestro de escuela, obligó a sus propios discípulos, que odiaban al profesor, para que le matasen con sus “estilos” o sea con los instrumentos de acero puntiagudo que se usaban para escribir. Así le desgarraron el cuerpo y se divirtieron bárbaramente al grabar letras en su piel.
Los cristianos de Imola se encargaron de sepultarle. La Iglesia lo reconoce como especial patrono de los maestros de escuela y conmemora a ese mártir el 13 de agosto. Una de sus reliquias es venerada en El Escorial (España).
La celebración en honor a San Casiano, es una de las fiestas religiosas que don Simón Rodríguez, el maestro del Libertador, recomendaba como de obligatoria asistencia a los alumnos, pasantes y maestros de las escuelas públicas, en su célebre propuesta que presentara al Ayuntamiento de Caracas con fecha 19 de mayo de 1794.
(Publicado en el Boletín de la Asociación de Jubilados del Banco Central de Venezuela, Año XVI, Nº 60, Marzo 2006).
Via | Carmelopaiva.com
0 comentarios :