Había una vez una increíble comarca que se encontraba ubicada en la profundidad del
bosque, en la cual habitaba un sinfín de animales,
Aquí también vivía Fito, un peculiar Zorro, quien se pasaba molestando a los animales porque pensaba que molestando sonreiría más y conocería la felicidad, pero todos se alejaban por su imprudente razón, Fito se sentía solitario y triste.
__Tengo que hacer más bromas, tal vez encuentre la felicidad__ Se dijo Fito
Sin embargo, para Fito ser leal y amable resultaba muy difícil porque inconsciente provocaba el engaño y la burla, pues de tal forma era su modo de ser.
Fito se sentía muy solo y trataba de dar lo mejor de sí actuando erróneamente al intentar llenar el vacío de su vida con bromas que lo dejaban insatisfecho, pues entre más crueles eran las bromas más infeliz se sentía.
Cierto día, Fito descubrió a Nita, una ardilla que jugaba sobre las ramas de un árbol, parecía muy feliz, Fito no desaprovecharía la oportunidad para conquistar su amistad y tratar de ser feliz, entonces, ideo un plan para llamar su atención.
__Si por supuesto ¡Será genial! __ Se dijo Fito
Enseguida se acercó hasta un panal de avispas que se encontraba muy cerca de la Ardilla, enseguida el Zorro se dejó caer sobre el césped y comenzó a gritar.
__ ¡Auxiliooo!__ Gritaba Fito
Nita Ardilla era muy amable y rápidamente bajo del árbol para ayudar al adolorido Zorro, pero cuando Nita se acercó, Fito ventajosamente dió un salto alcanzando el panal de avispas y lo para sacudió fuertemente, las avispas salieron muy enojadas.
__ ¿Quién golpeo nuestra casa? __ Advirtieron las avispas.
Y sin perder tiempo fueron contra Nita azotando tremendos piquetes.
Nita se encontraba muy picoteada mientras Fito disfrutaba grandemente de su travesura.
__Je je je ¡Qué feliz soy!__ Se dijo Fito
Fito pensaba que mientras más bromas hacía, mas reía, y entre más reía, más feliz creía que era, estaba muy lejos de descubrir que su manera de actuar no era la correcta para conquistar amistades, y lograría ser feliz, porque no lograba sentir armonía en su corazón,
Una tarde que Fito caminaba solitario por el bosque, lamentable fue cautivo en la trampa de unos cazadores.
__¡Auxilioo!_ Gritaba Fito
Pero aunque todos escucharon sus gritos nadie fue en su ayuda porque pensaron que se trataba de una de sus artimañas para llamar la atención y burlarse.
Enseguida Nita Ardilla descubrió a Fito y sin dudar fue a él l para liberarlo, pero las avispas insistían que lo dejase a su suerte.
__No Nita Ardilla, no lo liberes para que aprenda la lección y deje de hacer bromas __ Señalaron las Avispas.
Pero Nita actuó con el corazón y amablemente liberó a Fito.
__!Gracias!__ Indico Fito Zorro muy apenado.
__No amigo para eso estamos, hoy por ti, mañana por mí __Contesto Nita.
Fito suspiró contento porque Nita lo llamó amigo, al escuchar esa palabra finalmente había sentido regocijo en su corazón y por primera vez sonrió feliz.
__¡Que feliz me siento! __ Dijo Fito.
__ Exactamente así se siente la felicidad y no tienes que buscar mucho, la felicidad está presente todos los días en cada detalle por simple que sea, incluso está en ese gentil acto que te conmueve a sentir paz, armonía, bienestar, tranquilidad, comodidad, plenitud, satisfacción y sin importar más nada que ser feliz, porque al querer obtener amistad y felicidad a base de engaños, traiciones, burlas, bromas solo lograrás que todos se alejen de ti y nadie quiera ser tu amigo, puesto los amigos se cultivan día a día con lealtad, sinceridad, empatía, solidaridad, equidad mutua, compartir sin esperar nada a cambio te hace sentir plenitud, contar con un amigo sincero y leal, e incondicional, contar con un amigo que se preocupa por ti y hace lo posible por verte feliz, eso es felicidad__ Agrego Nita.
Fito aprendió la lección y cambio su brusca forma de ser por gentileza, respeto consideración y aprecio, además fue muy querido por todos,
Nita Ardilla y Fito el Zorro fueron amigos inseparables, compartieron su alegría y vivieron muy felices por siempre.
FIN
Autora: Amparo Martí
H. Matamoros, Tamaulipas, MEXICO
